En mi Corazón
by Elizabeth Challinor
Yo tengo una rosa
¡Es preciosa!
Vive en mi corazón
Hay días
Sólo siento las espinas
Hay momentos que sale el sol
Cuando recuerdo
Y lloro por dentro
Pienso
En la rosa
Que hay que regar
Cuando me agarro a la vida que tengo
Doy gracias
No dejaré de amar
Recuerdo a mi madre
Se iba al hospital
Quedamos con los vecinos
Nunca más la vimos
Recuerdo a mi padre
En el patio abrazándonos
Llorando de rodillas
Los vecinos diciéndole
No se lo digas
Que son muy pequeñitas
Con 3 y 6 años
Pasamos a vivir
Un día con un familiar
Un otro día con otro
Papá tenía que trabajar
Mi abuela se puso de luto
Y nunca más lo quitó
Mi abuelo siempre cabizbajo
Y durante años dejó
de hablar
Cada vez que se hablaba de mi madre
Mi abuela, mi abuelo mi padre
Lloraban
Del niño nunca hablaban
Por lo visto era tabú
Mi padre se casó de nuevo
Y así pasaron los años
Crecí y decidí
Sacar a mamá y al niño para incinerarlos
Cuando llegamos al cementerio
Me cuesta tanto recordarlo
¡No! ¡No! ¡No!
¡Qué no!
Ahí solamente está tu madre
No hay ningún niño fallecido
Venimos para casa
Se lo decimos a mi padre
¿Sería una equivocación?
Nunca olvidaré
La expresión de su cara
Se echó a llorar
Y no dijo nada
Solamente lloraba
Llamamos a mi prima
La mayor de la familia
Mira
El niño se enterró con mi madre ¿verdad?
A nosotras siempre nos lo han dicho
Lo siento
Tu hermano está perdido
Se lo robaron a tu madre
Lo que pasa es que mi padre
Siempre prohibió que lo dijera
Estabais sufriendo tanto
No quería que supieran
En el registro civil
Se repite la historia
Su madre, sí
Muerta de parto
Pero no
No hay registro
De ningún niño fallecido
¿El niño dónde está?
¿Si no está muerto y no está vivo?
En el hospital central de Sevilla
Preguntamos por qué mi madre falleció
¿Tenía alguna enfermedad?
Éramos muy pequeñas
Para que nos dijeran la verdad
Dicen que mi madre allí nunca ha estado
Le enseñamos el papel de defunción firmado
Por el director del hospital de Cinco Llagas
Querían quedarse con el papel
¡No! ¡No! ¡No!
En el ayuntamiento confirman
Que sólo está enterrada mi madre…
Y mi padre
Muy mayor
Padece del corazón
Empieza a contar
Había escuchado a mi madre
Chillar y llorar
Estaba con familiares al lado esperando
Una monja salió para fuera
Con un bebé envuelto
En una mantita
No sabía si era su hijo o hija
En seguida salieron
Y anunciaron el fallecimiento
¿Qué ha dicho?
Mi madre había tenido
“Un pequeño accidente”
Mi padre se volvió loco
No se daba cuenta ni del niño ni de nada
Mi tía, mi abuela
Empezaron a preguntar
Todo el mundo se encogía de hombros
Decían que nada
Ninguno sabía dónde estaba
Después de tanto exigir
Se lo enseñaron
Un bebé congelado
Enorme
¿Recién nacido?
¡Ese no es mi hijo!
Mi padre no paraba de gritar
Le dijeron
Ese era el que había
Que se callara
¿No tenía otros críos para criar?
No querían que quedaran
Ellos también bajo tierra…
Eran
Los tiempos de Franco
Se tuvieron que callar
Tengo una rosa
¡Es preciosa!
Vive en mi corazón
Hay días en que sólo
Siento las espinas
Recuerdo a mi padre
Siempre pendiente del programa
De los niños robados en la televisión
Hay otros días
Que la rosa
Me llena por dentro
Y apesar de toda la tristeza
Me agarro a lo que tengo
Y sigo viviendo
Pienso
En ti, rosa
En tu belleza
Hay que regarte
En ti, hermano
No dejaré de buscarte
Ni dejaré de amar
Inspirado en la historia de Esmeralda y Graci Fernández Portillo en memoria de sus padres Encarnación Portillo Espinar y Rafael Fernández Espinosa.